La cirugía de la catarata se realiza cuando el paciente nota alguna limitación para su vida que le sea manifiesta, relacionada con una limitación de la visión. El impacto de esta limitación visual puede ser muy variable, dependiendo de la actividad y estilo de vida del paciente. Sin embargo, en general, nunca esperamos los oftalmólogos modernos a que el paciente vea mal para operarle, puesto que solo serviría para atrasar un procedimiento que, realizado adecuadamente, produce resultados significativos y muy positivos para la calidad de vida del paciente.
Cirugía con lentes intraoculares
La intervención consiste en la eliminación del cristalino opaco o catarata y la implantación de una lente intraocular, cuya elección depende del Cirujano Oftalmólogo, ya que se debe adecuar a las necesidades del paciente, su estilo de vida y las características de su ojo.
En general, se busca que el paciente no requiera de la utilización de gafas para ver de lejos y que, en lo posible, tampoco sea necesario para ver de cerca o a distancias intermedias.
¿Qué tipos de lentes intraoculares se recomienda en cada caso?
Las mejores opciones son las lentes multifocales y las llamadas extensión de foco (EDOF). Las lentes monofocales, si bien también son utilizadas, tienen una menor cantidad de ventajas ópticas.
Las lentes multifocales posibilitan que los pacientes puedan no solamente ver mejor de lejos, sino que arrojan resultados positivos para todas las distancias focales.
Los resultados de la cirugía
Tras la intervención, la visión suele ser muy buena, salvo que existan otras patologías que limiten al paciente. En general, la persona recupera su visión de modo estable y cómodo al segundo día y es capaz de realizar todas sus tareas normales al tercer día, incluidas las actividades en el ordenador y de lectura.
Las lentes intraoculares están construidas según distintas tecnologías ópticas. La elección de cual es la que más conviene al paciente debe hacerla un cirujano oftalmólogo experto y con formación adecuada, quien decidirá el mejor tipo de lente para cada paciente, para conseguir el más óptimo resultado.